Trampas Mentales que Bloquean la Innovación
Este post explora los sesgos cognitivos que pueden bloquear la innovación. Discute cómo estos sesgos pueden afectar nuestra capacidad para generar nuevas ideas y tomar decisiones informadas
Antes que nada, quiero aclarar algo que seguramente se están preguntando. "Diego, ¿no se supone que te ibas a tomar un descanso?" Sí, es cierto, pero mi mente es inquieta. La verdad es que no puedo dejar de escribir e investigar estos temas que me apasionan, y lo que es más importante, compartirlos con ustedes, siempre que estén interesados, claro. Así que por el bien del argumento, vamos a decir que mis vacaciones fueron 3 días con eso, estoy descansado y continuamos con la vida ¿vale?
La innovación va agarrando terreno.
La innovación es un motor adaptable y aplicable de crecimiento y éxito en varios dominios. Potencia el desarrollo económico, el rendimiento organizacional y los resultados educativos. Al aprovechar las ideas internas y externas, promover habilidades técnicas avanzadas y respaldar entornos innovadores, las organizaciones y regiones pueden desbloquear beneficios sociales y económicos significativos.
Los procesos con los que se implementa la innovación han ganado relevancia en los últimos años debido a la necesidad las organizaciones de diferenciarse, expandirse y competir. Muchas empresas, que antes ni siquiera habían escuchado la palabra "innovación", están adoptando estas metodologías en su organización. Sin embargo, no todo es color de rosa. La innovación no siempre es miel sobre hojuelas; existen sesgos cognitivos que, si no se identifican y se gestionan, pueden resultar contraproducentes, incluso eclipsando los beneficios del proceso de innovación
¿Qué es un sesgo cognitivo de innovación?
Un sesgo de innovación se refiere a una forma de pensar o ver las cosas que puede influir en cómo las personas perciben, evalúan o adoptan innovaciones. Estos sesgos pueden afectar tanto a individuos como a organizaciones, y a menudo pueden dificultar bastante el proceso de innovación.
Los sesgos específicos de innovación se refieren a los cambios constantes en la lógica que influyen en cómo innovamos, incluyendo la creación, valoración e implementación de nuevas ideas. Estos sesgos pueden aparecer por varias razones, por ejemplo, limitaciones de pensamiento, influencias sociales, y factores internos de organizaciones y ecosistemas. Es muy importante entender estos sesgos para hacer más confiables y efectivos los esfuerzos de innovación.
¿Todos son malos?
No todos los sesgos son malos, como en toda familia, hay una oveja negra, en este caso la oveja gris se les conocen como “heurística”. Son atajos mentales que nos ayudan a sobrevivir, pero también pueden llevarnos a errores que limitan nuestra creatividad y pensamiento.
Estos "errores" son causados por nuestras experiencias y conocimientos previos y pueden afectar la generación de nuevas ideas. Aunque pensamos que tomamos decisiones de manera clara, muchas veces son guiadas por estos sesgos. Por eso, es vital aprender a reducir sus efectos negativos en la innovación.
¿Cómo se clasifican?
Según mi opinión e investigación, he dividido los sesgos cognitivos en tres grupos. Estos grupos muestran cómo los sesgos cambian nuestra percepción, decisiones, y cómo interactuamos con la autoridad y sociedad. Entender estos grupos es importante para encontrar y reducir los sesgos en las decisiones y procesos de innovación:
Sesgos de percepción: Son los que afectan nuestra forma de ver e interpretar la información. Nos hacen centrarnos en ciertos detalles e ignorar otros, cambiando nuestra visión de la realidad.
Sesgos de decisión: Son los que afectan nuestra forma de tomar decisiones. Pueden cambiar nuestras preferencias, cómo vemos los riesgos y beneficios, y si mantenemos o cambiamos de opinión después de decidir.
Sesgos de autoridad y social
: Son los que nos hacen seguir la opinión de los expertos o la mayoría sin cuestionarla, debido a su autoridad o a la presión social.
¿Cuáles son los sesgos de la innovación?
A continuación, presentamos una lista de algunos de los sesgos cognitivos más comunes que pueden surgir durante el proceso de innovación. Es importante tener en cuenta que todos estamos sujetos a estos sesgos en mayor o menor medida, y que reconocerlos es el primer paso para mitigar su impacto:
Reconocer estos sesgos es el primer paso para superarlos. Recuerda, la innovación no siempre es un camino fácil, pero con la mentalidad correcta, podemos superar los obstáculos y alcanzar nuestros objetivos.
Conclusión
Es esencial entender que nuestros sesgos cognitivos pueden influir en nuestras decisiones, limitando nuestra capacidad para innovar con eficacia. Al ser conscientes de estos sesgos, podemos cuestionar nuestras suposiciones y abrir nuestras mentes a nuevas posibilidades.
Para superar estos sesgos, es beneficioso practicar el pensamiento lateral y desafiar nuestras creencias y suposiciones existentes. Esto puede implicar cuestionar la autoridad, estar abierto a tomar riesgos y explorar ideas que pueden parecer contraintuitivas o desconocidas.
Además, es vital promover un entorno que valore la diversidad de ideas y minimice la conformidad. Esto puede implicar animar a los miembros del equipo a expresar sus opiniones y desafiar las ideas existentes, independientemente de su popularidad o aceptación.
Por último, es importante recordar que la innovación no es un proceso lineal y que es normal experimentar fracasos y contratiempos. Recuerden, es crucial encontrar orden dentro del caos. De ahí es donde salen las mejores ideas.
En conclusión, al reconocer y superar nuestros sesgos cognitivos, podemos tomar decisiones más informadas y efectivas, lo que puede conducir a resultados de innovación más exitosos.